Efectivamente, los vecinos y vecinas de la calle Monturiol, tramo Abat Escarré y passeig del Ferrocarril, estamos disfrutando desde hace unas semanas de una pequeña zona ajardinada, donde antes era un espacio para perros. Este jardín no ha salido por arte de magia ni ha caído del cielo, sino que es fruto de la dedicación y el trabajo voluntario y desinteresado de un vecino.
Ahora de lo que se trataría es de encontrar la colaboración con dicho vecino, el cual tiene compromisos laborales y familiares que no le facilitan la dedicación necesaria para el mantenimiento de este bello rincón del cual todos nos beneficiamos. Sin duda el trabajo voluntario y la cooperación de los ciudadanos y ciudadanas siempre permite conseguir buenos y positivos resultados.
Invitamos a los vecinos y vecinas a colaborar, pues con una o dos personas de cada portal del tramo de la calle se podría crear un equipo de voluntarios/as para mantener nuestro jardín; no obstante consideramos que la actuación del Ayuntamiento también sería conveniente para que nuestro rinconcito pudiera mantenerse atendido a lo largo del tiempo.